Minería responsable en República Dominicana: protegiendo agua y suelos

La minería responsable es un enfoque que busca extraer recursos minerales de manera que se protejan el medio ambiente y el bienestar de las comunidades locales. En palabras simples, significa que las actividades mineras no deben poner en riesgo el agua, los suelos ni la biodiversidad, mientras contribuyen al desarrollo económico del país.

En la República Dominicana, este modelo es clave para garantizar que la minería aporte al crecimiento económico sin deteriorar los recursos naturales esenciales para la vida humana y la agricultura.

La importancia del agua y los suelos.

El agua y los suelos son recursos vitales para la agricultura, el abastecimiento de agua potable y la biodiversidad. Según el Viceministerio de Suelos y Aguas del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales , esta institución “es responsable de gestionar de manera integral y sostenible los suelos y las aguas interiores del país, garantizando su uso racional y la preservación de las cuencas hidrográficas”.

Proteger estos recursos asegura la seguridad alimentaria, la salud de las comunidades y la resiliencia de los ecosistemas.

Prácticas de minería responsable en la República Dominicana

Algunas empresas mineras han adoptado medidas concretas para reducir los impactos sobre el agua y los suelos:

• Reforestación y restauración de cuencas hidrográficas: La Dirección General de Minería ha implementado planes de desarrollo para preservar cuencas y áreas sensibles, en colaboración con el sector privado y las comunidades locales.
• Cumplimiento de normas ambientales: Empresas como Barrick Gold han sido evaluadas en su desempeño ambiental, incluyendo la gestión de impactos sobre agua y suelos, como parte de estudios de impacto ambiental.
• Educación y sensibilización: Iniciativas gubernamentales y privadas promueven la educación ambiental en comunidades afectadas, fomentando prácticas agrícolas sostenibles y el monitoreo de fuentes de agua.

Desafíos y áreas de mejora

A pesar de estos avances, persisten retos importantes:

• Extracción ilegal de recursos: La sobreexplotación de ríos, como el río Nizao, ha provocado daños ecológicos severos, afectando la calidad del agua y la estabilidad de los suelos.
• Conflictos con comunidades locales: Algunos proyectos mineros, como los de Barrick Gold en Sánchez Ramírez, han generado tensiones debido a preocupaciones sobre compensaciones y riesgos ambientales.

La minería responsable en República Dominicana tiene el potencial de proteger los recursos hídricos y los suelos si se implementan prácticas adecuadas, se cumplen las normativas ambientales y se fomenta la participación activa de las comunidades.

Fortalecer la colaboración entre gobierno, empresas y sociedad civil es esencial para garantizar un desarrollo minero sostenible que beneficie a las generaciones presentes y futuras, asegurando un equilibrio entre crecimiento económico y conservación del medio ambiente.